RELIGIÓN Y ESPIRITUALIDAD // Isidoro García

Tomado de:
Isidoro García
https://www.atrio.org/2021/10/hablando-de-dios/#comments 

La religión no es solo una, sino cientos. La espiritualidad es una.
La religión es para los que quieren seguir los rituales y la formalidad. La espiritualidad es para los que quieren alcanzar la realización espiritual sin dogmas.
La religión es para aquellos que necesitan que alguien más les diga qué hacer, quieren ser guiados. La espiritualidad es para los que prestan oídos a su voz interior.
La religión tiene un conjunto de reglas dogmáticas e incuestionables que has de seguirse sin chistar. La espiritualidad te invita a razonarlo todo, cuestionarlo todo y decidir tus acciones asumiendo las consecuencias.
La religión habla de pecado y de culpa. La espiritualidad te dice que ya pasó, no te remuerdas por lo que ya pasó, más bien levántate y aprende del error.
La religión lo reprime todo, te vuelve inauténtico (impostado). La espiritualidad lo trasciende todo, te hace verdaderamente ser tú.
La religión se te inculca desde niño, como la sopa que no quieres tomar. La espiritualidad es el alimento que tú mismo buscas, que te satisface y es gustoso a los sentidos.
La religión inventa (ignora la ciencia y el conocimiento viene de “Arriba”) La espiritualidad descubre (se apoya en la ciencia, el conocimiento viene de abajo: la humanidad).
La religión no indaga ni cuestiona. La espiritualidad lo cuestiona todo.
La religión es humana, es una organización con reglas. La espiritualidad es divina, sin reglas.
La religión es causa de división. La espiritualidad es causa de unión.
La religión te busca para que creas (busca adoctrinarte, catequizarte). La espiritualidad la tienes que buscar tú.
La religión sigue los preceptos de un libro sagrado. La espiritualidad busca lo sagrado en todos los libros.
La religión se alimenta del miedo. La espiritualidad se alimenta de la confianza.
La religión te hace vivir en el pensamiento (la mente consciente) La espiritualidad te hace vivir en la conciencia (la mente total, con prevalencia del “espíritu” subconsciente: el sí mismo)
La religión se ocupa del hacer (para obedecer a “Dios”) La espiritualidad se ocupa del SER.
La religión te alimenta el ego (centrándote en la mente consciente egoica) La espiritualidad te hace trascenderlo (te centra en el “espíritu” supraconsciente, y eso te desapega).
La religión te hace renunciar al mundo. La espiritualidad te hace vivir (el mundo en Dios, no renunciar al mundo).
La religión sueña con la gloria y el paraíso. La espiritualidad te hace «tocarlo con la puntita de los dedos”, aquí y ahora.
La religión vive en el pasado y en el futuro. (Por eso es hiper-pesimista con el presente, hasta la obsesión y la paranoia. Y por eso genera amargura, rencor y odio al contrario). La espiritualidad vive en el presente, en el aquí y ahora. (No es “una triste noche en una mala posada”, aunque muchas veces lo parece. Y por eso genera Alegría y optimismo personal).
La religión cree en la vida eterna. La espiritualidad te hace comprenderla, (sin esperarla: “Aunque no hubiera cielo yo te amara, y te admirara”…).
La religión te da promesas para después de la muerte. La espiritualidad te ilumina para encontrar a Dios en tu interior en esta vida en el presente, en el aquí y el ahora.
La religión te somete. La espiritualidad te impulsa.