Como muchos y muchas sabéis, Ana María de las Heras había asumido la responsabilidad de animar los dos talleres de meditación en silencio del próximo mes de agosto, en Artieda (Navarra) y en Galapagar (Madrid).
Pero la situación acaecida a partir de la crisis del coronavirus aconseja suspender esos talleres, a la espera de poder vivirlos al año siguiente.
Cuando la vida nos detiene, es tiempo de mirar «hacia adentro», habituarnos con nuestro mundo interior, para que así pueda luego florecer «hacia fuera», en beneficio de los demás. Es un tiempo de barbecho, dejando la tierra preparada y descansada, blanda y receptiva, para que pueda germinar en sus mejores frutos.
Aprovecho para reiterar la gratitud y el reconocimiento a Ana María por su servicialidad y bien hacer, y seguimos cuidando el «barbecho» hasta agosto de 2021.